La comunicación y la fijación de metas compartidas son la clave para que funcionen los equipos multidisciplinarios.
Las organizaciones, en pos de parecer modernas, promueven el trabajo en equipo y la desaparición de los compartimientos estancos. Sin embargo, el trecho entre el dicho y el hecho suele ser bastante largo.
Normalmente, en los equipos multidisciplinarios, ninguno de sus integrantes toma el proyecto como propio y lo único que logran es quitarle tiempo al "trabajo real" que se acumula en cada una de las oficinas, dicen los especialistas.
"Lo que sucede es que los intereses funcionales prevalecen sobre la visión de conjunto", explican.
Así, el que pertenece a marketing, encontrará que los demás no acompañan la urgencia que exige el medio de negocios y sí, por el contrario, es de un área administrativa, productiva o de servicios pensará que en las áreas comerciales nadie considera aspectos críticos como la capacidad de producir, facturar y cobrar, además de vender. El ejecutivo de legales o auditoria siente que los demás no quieren escuchar los riesgos que plantea el proyecto y si es responsable de sistemas siempre le pedirán imposibles.
La dificultad de tratar los problemas en forma sistemática es otro obstáculo reconocible: "No se utilizan modelos que faciliten el análisis de la información y la adopción de las mejores decisiones, por lo tanto, es habitual que se discutan temas de peso sin información suficiente o, cuando se dispone de información, nose hace un an´lisis exhaustivo de ella". Se toman por válidos síntomas en lugar de causas, se adoptan decisiones prematuras que deben ser revisadas constantemente, no se definen medidas de éxito para establecer grados de avance y como consecuencia de todo esto, los acuerdos no se cumplen y la tarea languidece.
El trabajo en equipo es una necesidad ineludible y una práctica habitual para formular estrategias, lanzar nuevos productos y servicios, solucionar problemas o mejorar procesos. Sin embargo es común escuchar que no se cumplen las expectativas de resultados y participación.
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